María Lionza. Diosa de la Montaña.

Yo Castigo al Espíritu Malo, pero lo castigo con Dios.

Sin Dios no puedo hacer nada”

Gregorio Camacho (1916-1983)


Ser espiritista o Espiritualista.


Internalizar o no las creencias de nuestra Reina y de nuestros ancestros es lo que hace la diferencia.


El que cree o practica el culto de Maria Lionza, sabe que en sus oraciones debe pedir por los vivos y por los muertos, por las ánimas, por los enfermos que se encuentran en los hospitales, por los niños que no tienen padre ni madre, por los encarcelados, y por todo aquel que necesite una palabra de consuelo, recordando que a la final, todos somos hijos de Dios, y éste en su inmensidad, siempre quiere el bien para todos.


Ser Espiritualista, indica que el creyente- practicante entiende que el Marialioncerismo no es una religión, sino un culto que basa sus creencias en la Tradición Oral. Y que además, internaliza cada uno de los mensajes que recibe. El Espiritualista no aleja a Dios de su camino, aún cuando cree en María Lionza como ser de Luz que ha sido bendecida y con venia para gobernar algunos espíritus en la tierra.


Dentro de esta filosofía, el practicante del culto mantiene un equilibrio en cada una de las facetas de la vida “Emoción-reacción física-Espíritu”. De igual manera, hace entender que el Espiritista-Espiritualista no tiene consigo una varita mágica que hace aparecer dinero, novios, novias con los mejores cuerpos y rostros, no resucita familiares fallecidos, tampoco levanta casas del polvo o cosas por el estilo; el Médium sirve de orientador, de consejero, receta baños, invoca oraciones y espíritus para den los mensajes que sean necesarios.


El creyente-paciente, debe entender que el espiritista es un ser humano, y el Médium debe estar siempre en la búsqueda del conocimiento y entendimiento.


El rostro de María Lionza.


Si bien es cierto que Dios, a través de la Biblia nos dice “No tendrás otro Dios que a mí. No te harás esculturas ni imagen alguna de lo que hay en lo alto de los cielos, ni de lo que hay abajo sobre la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra (…)” Muchos de nosotros hemos levantado imágenes, servido ofrendas a esculturas de yeso, de cartón, a pinturas y hasta hemos adornado altares con objetos simbólicos. Pero esto, más allá de ser un pecado o una justificación considero que es parte del fervor religioso, que no sólo se manifiesta en el espiritismo, sino en cada una de los cultos, religiones y casas de oración que existen en el mundo.


María Lionza abunda en imágenes de yeso, en madera, en obras de arte y cualquier tipo de figura que sirva para representar a la deidad. Se atreven a pintarla quienes no saben cual es su rostro, quienes no saben de su pureza. Lo cierto es que nuestra Reina es única, rubia o morena, siempre será ella. Siempre tendrá como techo las estrellas y como paredes al viento.


El rostro de María Lionza, se dice sólo ha sido visto por Don Nicanor Ochoa, el único ser humano testigo de su coronación espiritual.


María Lionza, la Diosa de Yaracuy.


Nuestra Reina, no pide sacrificios ni almas a cambios de Favores. Tampoco pide sacrificios no esfuerzos sobrehumanos… Sólo pide para sus hijos humildad ante los altares, sencillez en el trato con los hermanos del culto y buena voluntad en las acciones que se emprenden.

No hay comentarios.:

La Reina de Mil Amores.

La llamamos “Madre”, invocamos su nombre y lo hacemos con respeto y Admiración. No es para menos, María Lionza, es una Reina. Su sólo nombre produce vibraciones en nuestro cuerpo, eriza el cuerpo, agita las pulsaciones y desata los sentidos, ella es energía y esa fuerza sobrenatural nos invita adentrarnos en un mundo místico.


Esta Tierra que pisas, es la que nadie tiene el derecho a lastimar.

Tus creencias deben mantenerte firme, no desvanecerse bajo la lluvia, cada paso debe ser tan firme como el eslabón de una cadena, no seas débil ante las tentaciones, ¿O sólo quieres ser un “algo” en vez de un todo?.”


María Lionza, es considera una Diosa Popular, reconocida por entidades espirituales como la única mujer coronada después de muerta. Utiliza como mensajeras a Indias que están bajo su astral, así como a las Reinas Guillermina y Margarita.


De estirpe, única e indomable, María Lionza representa para nosotros la Fe y la esperanza de un pueblo. Diosa de la Naturaleza, de las aguas, de las cosechas, de la Fauna y de la Flora, su corazón está desbordado de inmensa Bondad.


María Lionza vive en los corazones de cada uno de los que practican su culto. Algunos comentan que su morada es un “Palacio Encantado”, custodiado por Jaguares y Anacondas, dónde suele invitar a sus hijos para que éstos reciban mensajes, encuentro al que son llamados muchos, pero pocos los elegidos.


En sus ojos se ve reflejada la fe de un pueblo que cree en Dios y en la influencia de espíritus para resolver problemas, en Venezuela Maria Lionza es considerada una Reina.


"MARÍA LIONZA ES LA FUERZA DE LA NATURALEZA... LA FORTALEZA DE NUESTRA FE"